En entradas anteriores de nuestro blog te hemos hablado sobre el aumento del uso de LinkedIn por parte de las empresas y de muchos usuarios a partir de la llegada de Elon Musk a Twitter, un trasvase de actividad que también conlleva cambios a la hora de comunicarnos a través de la red profesional.

Aún así, desde hace casi un año, cada vez son más los usuarios de LinkedIn que emplean esta red para compartir más que sus curriculum y sus éxitos y fracasos laborales, sino que nos encontramos con cada vez más contenidos personales.

Esto ha llegado a un punto en el que incluso no usuarios de la red han oído hablar de la historia de aquel CEL que publicó un vídeo en el que lloraba mientras explicaba que había tenido que despedir a 2 empleados.

Esta publicación corrió como la pólvora y ha suscitado muchas opiniones, tanto a favor como en contra de ese contenido, pero lo que realmente importa de todo esto es ¿cómo usan las audiencias LinkedIn en la actualidad? ¿hay contenidos demasiado personales para esta red profesional?

Nosotros creemos que es importante el saber estar, también llamado etiqueta, de cada grupo y cada red y, para evitar bochornos y malentendidos, creemos que conocer la de LinkedIn antes de publicar contenidos de corte personal es necesario, ya que la imagen proyectada afecta tanto a la empresa en la que trabajas como a tu futuro laboral.

El porqué de las cosas

El refranero español ya nos lo dice “allá donde fueres, haz lo que vieres”. El propósito de LinkedIn es ser una plataforma en la que los profesionales puedan conectar entre ellos, es decir, publicar currículum, la formación de cada uno y establecer relaciones con otros profesionales. Además, desde hace unos pocos años, también es un espacio en el que compartir reflexiones, opiniones y consejo laboral y sobre el sector profesional de cada uno. Es decir, el corazón y motor de esta red sigue siendo el ámbito profesional.

¿Qué quieres conseguir en LinkedIn?

Considerando los datos anteriores hay que saber ver cuándo se está compartiendo de más; cuándo se sale uno del contexto. Volviendo al ejemplo del CEO llorón, afirmó que quería mostrar que los jefes también son vulnerables y que les es difícil despedir a personas. Eso puede parecer un mensaje válido para la red, pero el compartir estos sentimientos junto a la imagen de sus ojos llorosos despertó la ira de muchos y se le ridiculizó por otros.

Es decir, un mensaje válido, una ejecución pésima para una red profesional. Este jefe solo quería transmitir que se preocupa por sus trabajadores, pero si buscaba empatía y atención no debería haber explotado un mal momento de sus trabajadores para su ganar mérito propio. Una reflexión sencilla que le hubiese evitado este quebradero de cabeza.

Por otra parte, al publicar un contenido como ese, que rebasa lo profesional, suscitó respuestas agrías, severas y poco profesionales por parte de otras empresas y usuarios de LinkedIn. Se creó un microclima que acabó con la etiqueta de esta red profesional, acercándola más a lo que suele pasar en Twitter.

Por mucho que te disguste un contenido, hay que recordar que esta es una red profesional para profesionales, por lo que no es un espacio en el que trolear ni malmeter, hay que expresarse de un modo profesional tanto si se está a favor como en contra de lo que haya suscitado nuestra atención ya se trata de un perfil de empresa como individual. Es tu imagen profesional la que está en juego ¡cuídala!

Piensa en qué o a quién representas

El mejor consejo que te podemos dar para evitar malentendidos y mantener un tono siempre profesional en esta red es no olvidarte de donde estás. Tus movimientos, comentarios y acciones en esta red representan tanto tu marca profesional como la de la empresa para la que trabajas. Teniendo esto siempre en mente, solo tienes que analizar si las imágenes, palabras y contenidos que compartes en LinkedIn reflejan quién eres y los valores que más te representan para trazar una estrategia comunicativa que sea efectiva, refleje tu realidad y sea siempre profesional y respetuosa.

Encuentra el equilibrio

Ser profesional con tus contenidos en LinkedIn no significa no compartir absolutamente nada de tu vida privada o sentimientos en esta red, se trata de encontrar el equilibrio entre compartir algo personal y que esto siga enmarcado dentro de lo profesional. Elige temáticas o momentos de tu vida que ayuden a tus contactos, posibles nuevos empleos y a tus compañeros a conocerte mejor como persona, pero sin caer en fallos de juicio que puedan dañar tu imagen. Un poco de humanidad en esta red es refrescante, pero tampoco estás obligado a hacerlo si te incomoda. Al final, solo tú decides cómo quieres que te vea el mundo profesional.